Cuando veo mujeres con esos "taconines", no me dan envidia
por lo estilosas, me dan pena del futuro que les espera...
¡¡Si ellas supieran lo jodida que tengo la osamenta (y operada
en los dos pies de juanetes) sin haberme calzado en mi vida
esos aparatosos andamios!! La que les daría pena sería yo,
porque nunca lucí esbelta, ni estilizó mi figura semejante
complemento en el atuendo, y aun así sufrí las consecuencias
que les auguro (no que les deseo) a ellas...
Aunque igualmente, acuérdense de mí cuando en alguna boda o evento,
sufran atroces dolores en los pies mientras las cautas ni se fijan
en la elegancia de las incautas...
¡¡Ahí lo lleváis majas!!
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